Brexit cambió radicalmente el panorama europeo respecto las ventajas de libre circulación de recursos humanos entre Europa continental y el Reino Unido. Sin embargo, hay un país europeo para el que no cambió absolutamente nada: Irlanda.
Actualmente Iralanda es el único país que sigue conservando privilegios de circulación, residencia y trabajo tanto con el Reino Unido como con el resto de la Unión Europea. Esto ubica la ciudadanía y el pasaporte irlandés como uno de los más buscados del mundo.
La partida del Reino Unido de la UE causó y sigue causando tremendos problemas para británicos trabajando en Europa y europeos trabajando en UK. Muchos ya pudieron (luego muchas veces de un mar de trámites) regularizar sus respectivas situaciones y transformarse en residentes legales de sus respectivos nuevos países.
Pero los irlandeses no se inmutaron. Quien conozca la zona, sabe que desde hace ya bastante tiempo no existen puestos ni controles fronterizos entre la República de Irlanda e Irlanda del Norte (UK), y la idea siempre fue que esto no cambiara.
El Reino Unido entiende la relación que lo hermana con Irlanda es más fuerte que con la del resto de Europa (recordemos, Irlanda es el Uruguay de UK)
Es por esto que decidieron conservar sus privilegios independientemente de la salida del bloque.
Irlanda tiene numerosos programas de residencias para inversores y no son baratos. Pero quienes quieran fundar una startup y desarrollar una idea innovadora, están invitados a intentar migrar por esta vía.
Necesitan tener asegurados 50k en funding y la idea será evaluada en función de si tiene o no potencial de emplear a 10 irlandeses y llegar al millón de euros en revenue en los siguientes tres años. A los tres años y dependiendo del éxito de la empresa, se pueden obtener 5 años más de residencia, y se puede ir por la ciudadanía a los 8 años de residencia ininterrumpida.
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